El final de año es una oportunidad especial para liberar las energías negativas acumuladas, romper con vínculos que nos atan a vibraciones indeseadas y preparar el camino para un nuevo ciclo lleno de posibilidades. Este ritual, sencillo pero poderoso, te ayudará a cortar las influencias negativas que puedan estar afectándote, devolviéndote equilibrio, claridad y poder personal.

Necesitarás:

• Varillas de sahumerio de sándalo y ruda (de preferencia naturales, ya que las versiones comerciales con ingredientes artificiales o sintéticos carecen de propiedades mágicas).

• Una vela negra: símbolo de transformación y liberación.

• Agua florida o el humo de un incienso (para limpiar la vela).

• Aceite para consagrar de ruda o, en su defecto, el de oliva va muy bien para propósitos mágicos.

El origen de estas malas energías

Hay personas que, sin razón aparente, se convierten en nuestros "enemigos gratuitos". Estas personas llenas de envidia y malos deseos desarrollan una mirada que proyecta vibraciones capaces de bloquear caminos, suerte e interrumpir nuestro crecimiento personal, dificultando el camino hacia nuestras metas. Esto es conocido en muchas culturas como "Mal de Ojo" y se refiere a la energía negativa que una persona puede proyectar consciente o inconscientemente hacia otra, motivada por la envidia, celos y resentimiento. Energía que no solo es capaz de bloquear y desequilibrar, sino que también puede generar un malestar físico en quien la recibe. 

Este ritual trabaja para romper estas energías, devolviendo a quien lo realiza su energía purificada y protección espiritual.

Preparación previa:

Antes de comenzar con tu ritual, es importante que dediques unos minutos a relajarte y concentrarte. Puedes poner una musica suave que indusca a un estado de calma. Busca un lugar tranquilo donde no te interrumpan, ya que este es un momento sagrado y personal.

Pasos para el ritual:

1. Limpia tu vela:

Antes de encenderla, limpia la vela con agua florida o con el humo de un incienso. Este paso elimina cualquier energía externa que pudiera tener la vela para que no interfiera con tu intención.

2. Talla tu intención en la vela:

Usando un lápiz, un palillo o una aguja, escribe desde la base hacia la mecha (acto que en brujería significa alejar) lo que deseas cortar o alejar (por ejemplo: "corto toda energía negativa" o "rompo lazos con la envidia"). Este gesto simboliza la dirección en la que quieres que actúe tu intención: alejando lo que ya no deseas en tu vida.

3. Carga la vela con tu energía:

Coloca la vela en el centro de tus manos y llévala al nivel de tu chakra corazón (el centro del pecho). Cierra los ojos, respira profundo y visualiza cómo tu intención se impregna en la vela. Imagina cómo esta comienza a brillar con la energía que deseas manifestar.

4. Unta la vela con aceite:

Aplica unas gotas de aceite en tus manos, frótalas para calentar y activar el aceite y luego ponlo en la vela, con movimientos suaves, comenzando desde la base hacia la mecha, reafirmando tu intención de alejar lo negativo. Si no tienes aceite de ruda, el aceite de oliva es una excelente alternativa. 

5. Coloca y enciende los elementos:

Sitúa la vela en el centro; recuerda ponerla en un plato lo suficientemente grande para que quepa la cera y coloca las varillas de sahumerio a ambos lados. Enciende primero los sahumerios y, por último, la vela.

6. Haz tu oración de petición:

Mientras los elementos se consumen, realiza una oración con tus propias palabras, expresando desde el corazón lo que deseas liberar y atraer. Si necesitas inspiración, aquí te dejo una oración poderosa que puedes usar:

"Amado Universo y Madre Tierra, elevo esta plegaria ante ustedes.

Pidiendo su guía y asistencia.

Corto y libero ahora toda energía negativa.

Todo mal deseo o envidia que me ha sido enviado y que no me pertenece.

Que el fuego me otorgue fuerza, que el aire me llene de vitalidad,

Que el agua me purifique Y que la tierra me sostenga con amor.

Que así sea, así es y así será.

"Gracias, gracias, gracias".

Cierre del ritual:

Deja que la vela y los sahumerios se consuman por completo mientras te mantienes en un estado de calma y gratitud. Al finalizar, recoge los restos (cera y cenizas) y colócalos en una bolsa. Llévalos a un basurero fuera de tu hogar, simbolizando el acto de liberación y cierre.

Consejo de bruja: 

Este ritual se potencia cuando lo realizas con fe y concentración. Puedes acompañarlo con música suave, cristales como obsidiana o cuarzo ahumado, y una respiración pausada que te conecte con el momento presente.

Que este ritual sea una herramienta para cerrar tu año con fortaleza y armonía, abriendo espacio para un nuevo ciclo lleno de luz y bienestar.